¿QUÉ ES LA ABOGACÍA?
Abogar significa apoyar y defender una causa.
- Los defensores apoyan y defienden los derechos y necesidades de los pobres y vulnerables.
- Los defensores también les proporcionan las habilidades y oportunidades para hablar en su propio nombre.
- Los defensores de la justicia influyen en el debate público sobre un tema para cambiar las respuestas y las soluciones.
- La promoción tiene lugar a muchos niveles diferentes. Por ejemplo, los grupos de presión profesionales defienden una legislación específica, las organizaciones sin ánimo de lucro defienden a sus clientes y la legislación que les afecta, y los ciudadanos individuales defienden una necesidad de la comunidad o una causa que les interese. Cada defensor hace uso de su derecho a participar en el proceso democrático de nuestra nación.
- Abogar es hacer cambios.
- La promoción influye en los resultados.
- Abogar es dar voz a quienes no la tienen y ayudar a las personas a encontrar su propia voz.
¿CÓMO PUEDE LA ABOGACÍA AYUDAR A QUIENES SERVIMOS?
La defensa eficaz puede adoptar muchas formas. En última instancia, al cambiar la comprensión pública de un problema y sus soluciones, la incidencia política puede conducir a un mundo más justo. Como defensor, puede influir de las siguientes maneras:
- Tú educas. Como defensor, puede cambiar la forma en que el público y los funcionarios electos entienden su problema y los retos a los que se enfrentan sus clientes. Algunos legisladores tendrán un conocimiento profundo de su asunto. Otros sabrán muy poco al respecto. Todos serán bombardeados constantemente con información y peticiones de diversos grupos de interés y electores. Su trabajo consiste en mantener su tema en el centro de las prioridades en competencia, y determinar cómo lo percibe el público y su importancia.
- Usted es testigo. Su trabajo de servicio directo en su agencia le aporta experiencia como testigo de la vida real de los retos a los que se enfrentan los pobres y vulnerables. Puede informar a la opinión pública utilizando los datos y las historias que recopile sobre las necesidades de los pobres, las soluciones que serían más eficaces para abordar estas necesidades y los recursos necesarios para combatir las causas profundas y los efectos de la pobreza.
- Alista aliados. Al educar al público y a los funcionarios electos, consigues que personas y organizaciones apoyen tu causa y se unan a un movimiento por el cambio.
- Aprovecha los recursos. La política trata de la distribución de recursos escasos. Al educar al público y llamar la atención sobre su problema, contribuye a aumentar su importancia entre las causas competidoras.
- Usted mejora los servicios para los pobres. Gracias a su conocimiento de cómo funcionan realmente los programas en su organismo, puede llamar la atención sobre las políticas que son ineficaces o crean obstáculos innecesarios a los servicios, y trabajar para mejorarlas. Los defensores también responsabilizan a los legisladores de sus decisiones, ayudándoles a tomar decisiones informadas y prudentes.
- Usted facilita las conexiones entre legisladores y electores. Los legisladores quieren conectar con sus electores y responder a ellos. Como defensor, usted puede facilitar esas conexiones. Los legisladores agradecerán las oportunidades de comprender mejor las necesidades de sus electores y entablar relaciones con ellos. En el proceso de ponerles en contacto con sus programas y clientes, se establecerá como un recurso experimentado al que los legisladores y su personal acudirán con preguntas a medida que avance el debate sobre su asunto.
- Usted capacita a sus clientes. Al incluir a sus clientes en las conversaciones y en el establecimiento de relaciones con sus legisladores, les dota de habilidades y oportunidades para hablar por sí mismos.
¿QUÉ ES EL “FRAMING”?
No es sorprendente que la palabra “encuadramiento” signifique cosas distintas para cada persona. Los defensores a veces piensan que enmarcar un tema es utilizar un eslogan pegadizo para llamar la atención sobre el tema que les preocupa. Pero el encuadre va más allá de los eslóganes y los mensajes, que cambian según el contexto y las necesidades de un momento concreto. Sonja Herbert, del Grupo de Estudios de Medios de Berkeley, define los marcos como “… las estructuras mentales que ayudan a la gente a entender el mundo, basadas en suposiciones y valores particulares”. La idea es que ninguno de nosotros es una pizarra en blanco. El marco único de cada persona procesa de forma diferente las causas y consecuencias de las acciones que vemos en el mundo. Recibimos y comprendemos la información y nos formamos opiniones basadas en nuestras experiencias pasadas y nuestros valores más arraigados. Los legisladores y el público al que se dirige filtrarán todos los datos y mensajes que comparta a través de su marco y sus valores.
Los marcos no sólo influirán en la forma en que las personas entienden su trabajo y su problema, sino también en quién ven como responsable de resolverlo y qué soluciones creen que funcionarán. Examinar, por ejemplo, cómo influye un marco dominante en nuestra cultura, la importancia de la elección individual y la responsabilidad del propio éxito, en una conversación sobre salud. Discutir el problema del creciente número de niños con sobrepeso en los barrios urbanos de bajos ingresos dentro de este marco de responsabilidad individual conduce a soluciones como: “Las familias deberían hacer más ejercicio” o “Los padres deberían alimentar a sus hijos con comida sana”. Este marco ignora el contexto en el que los individuos toman decisiones sobre sus vidas. Ignora la posibilidad de que un barrio urbano con mucho tráfico no sea un lugar seguro para que los niños jueguen y hagan ejercicio, que la familia no tenga coche o no viva cerca de un transporte público de calidad para llegar a las tiendas de comestibles que no se ubican en barrios de bajos ingresos, o que las familias que sobreviven mes a mes se vean obligadas a elegir alimentos de menor calidad y más baratos en lugar de frutas y verduras. Enmarcar las decisiones individuales en el contexto de una comunidad insalubre ayuda a los defensores a argumentar eficazmente a favor de soluciones institucionales como la construcción de parques públicos o leyes de zonificación que incentiven las tiendas de comestibles y limiten los restaurantes de comida rápida.
Enmarcar bien una cuestión puede influir en la forma en que se presentan y debaten su problema y sus soluciones. Los siguientes pasos le ayudarán a pensar en cómo establecer conexiones entre las historias individuales y su contexto social a medida que trabaja para enmarcar sus temas.
CONSEJOS BÁSICOS PARA ENMARCAR
Haz los deberes: Para enmarcar un tema con éxito, asegúrese de comprender los marcos actuales utilizados para hablar de él. La mayoría de los legisladores y el público se forman opiniones sobre los temas basándose en la cobertura de los medios de comunicación. Haga un seguimiento de su tema en los medios de comunicación, tanto impresos como electrónicos. Imagina que no eres un experto en tu tema y hazte preguntas como éstas:
- ¿Qué le dicen los artículos e informes sobre el problema?
- ¿Por qué es importante y a quién le interesa?
- ¿Cuáles son las soluciones o quién debe arreglarlo? Si el problema se plantea de un modo que no respalda sus soluciones, piense en cómo los datos y las tendencias que ha observado en su organismo podrían ayudar a contar la historia de otra manera.
Defina sus valores fundamentales: Los hechos, los datos y los argumentos políticos pueden intimidar a personas que podrían ser defensores potenciales de su causa. Puede que le resulte más eficaz conectar con los valores de las personas. Los valores conectan con nuestras emociones y conforman nuestras motivaciones para actuar. Piense en estas preguntas:
- ¿Qué valores son fundamentales para nuestra visión?
- ¿Qué valores resonarán entre nuestro público objetivo?
- ¿Cómo podemos demostrar que este problema nos afecta a todos? (Consulte la doctrina social católica sobre el bien común para responder a esta pregunta).
Comuníquese dentro de su marco: Una vez que definas tus valores y el marco para debatir tu tema, trabaja para comunicarlo en cada mensaje que crees. Los mensajes cambiarán a medida que cambien sus objetivos y estrategias de promoción, y no habrá dos promotores que transmitan un mensaje de la misma manera. Sin embargo, si habla dentro de su marco de valores se mantendrá coherente, pero flexible. El Berkeley Media Studies Group y The Praxis Project recomiendan que los mensajes de su marco respondan claramente a estas tres preguntas:
- ¿Qué ocurre? Céntrese en una parte concreta del problema en lugar de intentar explicar toda la cuestión. Intenta mostrar cómo las instituciones sociales influyen en los individuos.
- ¿Qué importancia tiene? Comunique aquí sus valores subyacentes.
- ¿Qué hacer al respecto? ¿Quién y qué interviene en la solución? Comunique un paso de acción alcanzable y conciso.
REUNIÓN CON SU LEGISLADOR
Organización de la visita
- Las visitas pueden programarse a través de la agenda (secretaria de citas/calendario). Lo mejor es fijar la reunión con dos o tres semanas de antelación. Las reuniones suelen durar media hora, pero es posible que sólo dispongas de 10 o 15 minutos. Un feligrés (representante parroquial) que concierte una cita con un legislador que figure en la lista de su parroquia debe residir en el distrito del legislador, por razones obvias. Sin embargo, los profesionales y expertos médicos, educativos, políticos y de otro tipo que asistan a la reunión con el feligrés no tienen por qué ser de este distrito.
- Aclare el propósito de la visita. ¿Conocerse? ¿Expresar opiniones? ¿Buscar acción? Identifique a los asistentes. Aumentará sus posibilidades de encontrarse cara a cara con el diputado celebrando una reunión de grupo de electores que representen diferentes experiencias y procedencias. Esto amplía su base y su influencia.
- En función de la evolución legislativa, puede ser necesario reunirse con el personal en lugar de con el legislador. Dado que los legisladores dependen en gran medida de la opinión de su personal profesional, ésta es también una reunión muy importante. El personal puede facilitarle el acceso y, si simpatiza con su postura, puede convertirse en una voz de confianza al oído del legislador. Si su legislador decide adoptar una de sus causas, es el personal el que hará gran parte del trabajo. Pida reunirse con el Director Legislativo (DL) o el Asistente Legislativo (AL) que se ocupa del tema concreto del que desea hablar.
Planificación de la visita
- Elabore un orden del día sucinto. Si vas con un grupo, ponte de acuerdo antes sobre el objetivo y el mensaje. Muestre un frente unido; la división es irritante y confusa.
- Asignar un facilitador – Acuerde de antemano quién facilitará la reunión. El moderador hará las presentaciones, mantendrá a todo el mundo a tiempo y centrado en el objetivo, se asegurará de que se han presentado todos los temas y cerrará la reunión reiterando los puntos de seguimiento y dando las gracias oportunas.
- Haz los deberes. Tenga a mano datos y cifras bien razonados sobre su(s) asunto(s), pero sin agobiar. Esté preparado para responder a las preguntas y (cuando sea necesario) a los argumentos en contra.
- Decida quién hablará sobre qué tema o legislación.
- Tome decisiones antes de la reunión sobre cómo tratar las preguntas.
- Asegúrese de que todos los participantes en la reunión son políticamente astutos. Conozca la extensión de la circunscripción del legislador, las comisiones a las que ha sido asignado, el número de legislaturas que ha ejercido. Conozca el historial de voto del legislador, y/o su posición, sobre el asunto o asuntos en cuestión. Conozca el proceso legislativo y las acciones legislativas necesarias. http://thomas.loc.gov es una fuente oficial de información sobre el poder legislativo federal de Estados Unidos. Otra buena fuente es www.votesmart.org, que te ofrece el historial de voto de tus legisladores en proyectos de ley organizados por temas.
- Limite el número de temas que desea tratar. No abrume.
- Prepare un paquete de información “para llevar”. Este paquete puede incluir hojas informativas e historias que apoyen sus temas, paquetes de cartas a los electores y cualquier material informativo apropiado. También debe incluirse una solicitud específica de acción (dos o tres párrafos en los que se articule la acción legislativa solicitada y por qué debe llevarse a cabo).
Durante la visita
- Llegue pronto. Asegúrese de llegar pronto. Los legisladores están muy ocupados y a veces se retrasan. Prepárese para ser flexible y, si tiene varias visitas en un día, deje tiempo suficiente entre ellas para tener en cuenta las largas citas y el tiempo necesario para encontrar la siguiente consulta.
- Respeta el tiempo. Pídele al legislador el tiempo que tengas con él. Esto le ayudará a ajustar su visita para cubrir todos los temas y centrarse en los puntos más pertinentes.
- Sea cortés. Sea positivo, amable, educado y respetuoso, pero directo cuando interactúe con su legislador o miembro del personal. No se preocupe si no se reúne con su legislador. Los miembros del personal son los expertos en sus temas, informan al legislador con regularidad y a menudo redactan la legislación.
- Preséntese y exponga su problema. Ofrezca un apretón de manos firme. Indique el motivo de su visita: por qué está allí. Haga hincapié en que usted es un elector: esa es la clave. Nunca dé por sentado que su legislador o un miembro de su personal le recordará de una visita anterior, ya que ven a mucha gente con regularidad.
- Sea local y político. Utilice ejemplos de su experiencia personal y de su trabajo en la agencia para dar un rostro humano al tema. Empezar por los puntos de acuerdo. Sea políticamente inteligente, relacionando su asunto con las prioridades de su legislador y los intereses de los electores y de la comunidad del legislador. Incluya a miembros poderosos de la alianza que estén de acuerdo con su postura.
- Sea específico. No hay enemigos permanentes ni amigos permanentes. No ataques ni golpees a tu legislador en relación con su posición o sus votos. Reconocer sus preocupaciones. Hable desde la posición de intentar resolver el problema.
- Preguntas generales.
- ¿Qué problema intenta resolver la legislación propuesta?
- Si no es la mejor solución, ¿es la legislación una solución razonable y justa al problema?
- ¿Existen soluciones mejores que quedarían prohibidas o soslayadas con la aprobación de la legislación?
- ¿Se incluyen importantes “malas ideas” en la legislación que a primera vista parece una “buena idea”?
- Desde el punto de vista de la fe, debemos considerar el bien común y el impacto potencial en los más desfavorecidos.
- Responda a las preguntas. Prepárese para responder a las preguntas. Nunca des información falsa. Si no sabe una respuesta, sea sincero y prometa volver a ponerse en contacto con el legislador y el personal (¡y hágalo!) No hace falta ser un experto.
- Haz tu “petición”. Pregúntele a su legislador cuál es su posición al respecto. Pregunte incluso si cree que ya lo sabe. Escuchar cómo su legislador comunica su punto de vista le ayudará a elaborar mejor su mensaje en el futuro. A continuación, solicite una acción concreta que le gustaría que su legislador llevara a cabo. Las preguntas incluyen:
- Que se comprometa a votar a favor (o en contra) de una legislación concreta
- ¿Qué podemos hacer ahora o la semana que viene para impulsar nuestro resultado en este proyecto de ley?
- ¿Podemos contar con usted para (celebrar una audiencia; hablar con sus colegas legisladores; distribuir nuestro material a colegas legisladores)?
- ¿Podemos ponernos en contacto con usted la próxima semana/mes en relación con este proyecto de ley?
- Establecer los próximos pasos. Determine quién se encargará del seguimiento de determinadas medidas tras la visita. Ofrézcase a ayudar al legislador. ¿Enviará más información? ¿Le llamará un miembro del personal después de hablar con el legislador? Asegúrese de dejar su información de contacto completa. Pregunte cuál es la mejor manera de comunicarse con el legislador en el futuro.
- Gracias. Agradece al legislador o al asistente su tiempo.
Tras la visita
- Informe. Inmediatamente después de la reunión, informe al grupo. Determine qué fue eficaz y qué no. Las visitas personales siempre aumentan la concienciación de un legislador sobre un tema. Sin embargo, la eficacia de una visita de este tipo aumenta notablemente cuando va acompañada de acciones de seguimiento.
- Envíe una nota de agradecimiento o un correo electrónico que refuerce su mensaje y el impacto local, reafirme la comprensión de la postura del legislador, destaque los puntos principales de la visita y concluya con una anécdota personal que haya surgido durante la conversación. También debe incluir cualquier material o información adicional que haya solicitado.
FORMATO RÁPIDO PARA LLEVAR A CABO DEBATES
- Crear un clima abierto. Preséntense; agradezcan al legislador la reunión y expongan alguna postura favorable que ya hayan adoptado (si existe).
- Presente su mensaje.
- Haga una petición específica de acción legislativa. A continuación, indíqueles qué acción solicita. Una petición específica de acción legislativa le permitirá controlar la reunión. Usted no ha fijado el orden del día. Si se intenta desviar la discusión, simplemente, y con educación, vuelva a su tema. Por último, si el legislador parece apoyarle, busque un compromiso. Si el legislador sigue oponiéndose, pídale que mantenga la mente abierta y permanezca neutral.
- Responda a las preguntas de su legislador. Si no sabes la respuesta a una pregunta, no finjas ni vayas de farol. Di: “No lo sé, pero ya te lo contaré”. Entonces HÁGALO.
- No te quedes demasiado tiempo. Concluya la visita dando de nuevo las gracias. Reafirme su intención de transmitir cualquier información o material que haya solicitado el legislador.
- Envíe una copia a los demás miembros del grupo y a quienes ejerzan presión directamente en su nombre. Si la visita se realizó con un miembro del personal, dirija la carta al legislador con copia (cc) al miembro del personal.
¿CÓMO PUEDO SABER A QUIÉN DEBO DIRIGIRME?
Para encontrar a los legisladores de cualquiera:
- Vota con inteligencia
- Senado de Estados Unidos
- Cámara de Representantes de Estados Unidos
- La Casa Blanca
- Asamblea del Estado de California
- Senado del Estado de California
¿QUÉ DIGO?
Independientemente de si envía un correo electrónico o una carta, debe incluir su dirección de remitente y mantener una comunicación breve y directa. Utilice las mismas directrices para las reuniones de promoción en su comunicación escrita. Exponga su posición, utilice su encuadre y haga la “petición”.
¿QUÉ DIGO SI LLAMO EN LUGAR DE ESCRIBIR?
Si llama por teléfono a la oficina, sea breve. Un ejemplo es: “Soy un elector e insto (al senador ______, o al diputado _______ o al miembro de la Asamblea ________ a votar no a la AB 27”.